Persiste, aunque la vida se interponga en el camino
Carpe Diem: Persigue lo que te apasiona (especialmente si no tienes tiempo para ello)
¡Feliz lunes!
¿Cómo es posible que tengamos tantas cosas diferentes por hacer? Es increíble la cantidad de tareas, de proyectos, de responsabilidades, de compromisos, de pendientes, de llamadas, de mensajes, de correos, de situaciones por atender, de respuestas que dar, y en fin, de todo ese conjunto de cosas que hacen parte de la vida.
(Me cansé incluso escribiendo todo lo anterior).
Nuestro objetivo no debería ser evitarlas (porque dicho de entrada, es imposible), sino de encontrar el espacio disponible para poder trabajar en aquello que nos apasiona.
Y lo digo por experiencia propia.
Desde la semana pasada me encuentro en Medellín por trabajo, y sentarme a escribir como lo venía haciendo resultó ser una tarea excesivamente demandante. Entre todo lo relacionado al viaje y las crecientes demandas en el trabajo, sentí que la vida se dedicó a colocarse en la mitad entre lo que quería y lo que debía hacer.
¿Cuántas veces has sentido lo mismo?
¿En cuántas ocasiones has mirado a tu alrededor y ni siquiera sabes cómo empezar a trabajar por lo que quieres? ¿Cuántas veces has desistido por esa misma razón? ¿En cuántas noches te has dedicado a imaginar cómo sería tu vida si pudieras empezar a actuar?
Y entonces la vida pasa y lo único que puedes hacer es tomar un asiento y observarla. Me recuerda a esa frase de John Lennon:
La vida es lo que pasa mientras estás ocupado haciendo otros planes.
La verdad es que la vida no se va a detener. NUNCA.
Y eso, en lugar de desanimarte de alguna forma, debería convertirse en una alerta que te incite a tomar acción sin importar lo difícil que el panorama pueda parecer. Porque déjame decirte algo: SIEMPRE existe algo que puedes hacer al respecto.
No es cierto que las horas del día no sean suficientes
No es cierto que tengas tanto en tus manos que no puedas hallar el espacio para trabajar por lo que quieres
Son mentiras que nos repetimos para no poner el esfuerzo necesario.
Y lo sé porque en estos días conocí a una persona que me dejó con la boca abierta. Este hombre trabaja de 9 a 5 y es papá hace unos seis meses.
¿Te imaginas?
¡Papá hace unos seis meses!
Este hombre no termina de enviar su último correo cuando ya debe levantarse a darle la comida a su hijo y asegurarse de que duerma. Ni siquiera estoy seguro de si él mismo alcanza a cerrar los ojos por las noches.
No obstante, mientras todo eso ocurre, ha sido capaz de emprender un negocio y de hacerlo rentable.
¿Tiene algo él que no tengamos tú y yo? No.
¿Cuenta con más capacidades, con más aptitudes? No.
¿Tiene más tiempo libre que tú y yo? Definitivamente no.
¿Qué lo hace diferente? ¿Qué es lo que le ha permitido tener éxito en lo que hace? Una sola cosa en realidad: sabe lo que quiere y por qué es tan importante para él.
Así de sencillo.
Cuando supe de su historia, no encontré palabras para justificarme. Fue como verme en un espejo y pensar “¿de qué carajos me quejo?”. Reniego y reniego de la falta de tiempo de las últimas semanas, sin hijos y ciertamente con cero negocios bajo mi nombre, y aquí se aparece este tipo logrando todo lo que había deseado.
Los problemas en la vida son inevitables. Nunca podrías eliminarlos a todos. Así que, no deberías posponer el acto de vivir hasta que todo regrese a la normalidad. Existen demasiadas cosas por las que puedes ser agradecido cada día.
Jordan B. Peterson.
Cuando te encuentres en esa situación, piensa lo siguiente: SÍ soy capaz de avanzar en lo que quiero.
Consejo de la semana:
Si quieres avanzar en las cosas que quieres, entonces:
No te abrumes por la cantidad de responsabilidades. Ten presente esto: una cosa a la vez, un día a la vez. Repítelo las veces que sean necesarias.
Conversa contigo mismo y define qué tan importante es tu meta para ti. Si no lo es tanto, entonces no harás lo suficiente para convertirlo en realidad.
Convéncete de algo esencial: el éxito no llega para quienes no se sacrifican de alguna forma. Todo lo que vale la pena en la vida requiere de esfuerzo.
Y cuando lleguen esos momentos en los que quizás estés muy cansado para dar el primer paso en la dirección que quieres, recuerda que hay personas en el mundo con menos tiempo que tú y aun así se las arreglan para trabajar por el éxito con el que siempre han soñado.