Aprende a decir No para enfocarte en lo que quieres
Carpe Diem: Persigue lo que te apasiona (especialmente si no tienes tiempo para ello)
¡Feliz lunes!
Últimamente he sentido que los días transcurren con una rapidez que me deslumbra cada vez que me detengo a pensar en ello. Entre trabajo, responsabilidades, planes con amigos, parece que nunca hay suficientes horas en el día para hacerlo todo. Y así ha venido sucediendo las semanas más recientes.
Justo cuando pienso que tengo todo bajo control, algo sucede (bien sea en el trabajo o en mi vida personal) que me recuerda que todos estamos sujetos a los caprichos de la vida y que es más bien nuestra responsabilidad encontrar los espacios necesarios para enfocarnos en todo aquello que nos apasiona.
Fue así que me di cuenta de que si nos lo proponemos, es posible avanzar en nuestras metas así nuestra agenda esté ocupada, así estemos inundados de responsabilidades y de compromisos.
Se puede… bajo una condición.
Necesitamos aprender a decir No a lo que nos distrae de lo que queremos alcanzar.
Lo cual lleva a la pregunta… específicamente, ¿a qué cosas le deberíamos decir No?
Existen dos libros sobre este tema que sintetizan muy bien el objetivo principal de mantener el enfoque a pesar de las distracciones. Uno es No Excuses de Brian Tracy y el otro es The 10x Rule de Grant Cardone.
En ellos se resume a la perfección la mentalidad que separa a las personas que alcanzan el éxito de aquellas que no.
“Una persona de éxito se esfuerza. Ha hecho sacrificios y se ha comprometido a no tomar atajos para llegar adonde quieren estar. No se crean excusas. Sin embargo, una persona que no logra el éxito es lo opuesto: su vida siempre está llena de cosas más importantes que hacer”.
Brian Tracy.
Recuerdo la tarde en la que me tropecé con esta frase. Estaba en el balcón del apartamento en el que vivía con mi esposa. Veía a la distancia el mar y todo estaba en silencio. Ella leía un libro, yo intentaba concentrarme en lo que escribía. Tuve que detenerme porque me di cuenta de que durante muchos años había elaborado un número infinito de excusas cuando realmente pude haber actuado diferente.
No se trataba de apartarme de todo y de todos, sino de ser consciente de que si en verdad quería algo, debía ser intencional. Me puse a pensar en todas esas noches en las que sentía tanta frustración porque no veía movimiento en la dirección que anhelaba. Brian Tracy tenía toda la razón: no conseguía el éxito porque le daba prioridad a todo, menos a lo que decía era importante para mí.
No obstante, el problema no es tanto percatarse de ello, sino cambiarlo.
¿Cómo lo hacía?
Sencillo. Removiendo las excusas.
Una excusa que me repetía hasta el cansancio era que cuando llegaba de trabajar todo el día, estaba totalmente agotado. Ni mi cabeza ni mi cuerpo respondían de la forma en que quería. Es decir, era cierto: estaba exhausto. Pero entonces los minutos y las horas pasaban y allí estaba: viendo algún programa en la televisión y durmiéndome hasta demasiado tarde.
¿Por qué pasaba esto?
En pocas palabras, pasaba porque había creado una excusa. Y luego me repetía a mí mismo “no tengo tiempo”; y con esa misma frase pretendía justificar toda mi inacción respecto a lo que quería alcanzar, pero era eso precisamente lo que me frustraba, y así ocurría una y otra y otra vez.
Decir no era algo que no hacía parte de mi vocabulario. Podía decir no a la excusa de ver televisión y dormirme tarde, pero la verdad de todo es que por mucho tiempo no fui capaz de hacerlo.
“Sería escandaloso decir que quienes son infelices con sus resultados no están ejecutando alguna acción. Sí lo hacen - de hecho, todos lo hacemos. Lo que en realidad ocurre es que la mayoría de nosotros no damos los pasos necesarios para dar origen a la vida que tanto deseamos”.
Grant Cardone.
¿Qué es lo que quieres alcanzar?
¿Por qué es tan importante para ti?
¿Qué excusas te estás diciendo a ti mismo y que has aceptado hasta este momento en tu vida?
¿Qué mentiras sobre ti mismo te has repetido que no te permiten esforzarte lo necesario para crear la vida que tanto deseas?
Cuando encuentras esa motivación dentro de ti, lo único que importa es aprovechar cada segundo de cada día porque entiendes que el tiempo no es infinito y que tarde o temprano nos pasará factura.
“Enfréntate a tus decisiones con tus metas en mente. ¿Lo que estoy a punto de decidir me acercará a la meta que quiero alcanzar? Eso es lo que debes preguntarte”.
Brain Tracy.
Vivir en el momento también quiere decir que eres consciente del esfuerzo que debes colocar para conseguir la vida que quieres. Significa además alejar las distracciones y enfocarte en una o dos cosas que puedas llevar a cabo cada día que te permitan ir reduciendo la distancia entre tu meta y donde te encuentras ahora.
Nada de valor en la vida se hace realidad esperando a que llegue.
Consejo de la semana
Identifica todos esos factores que te distraen de tus objetivos. Considera desde lo más cotidiano hasta lo más relevante en tu vida.
¿Qué cambios puedes implementar que te permitan darle mayor prioridad a lo que quieres, sin eliminar por completo el resto?
¿Cómo puedes motivarte cada día a permanecer consistente?
Muchas veces, lo más simple conlleva a los más grandes resultados.
“Sé intencional con el éxito en tu vida personal, en tu carrera y con tu familia. Reducirás automáticamente tus posibilidades de éxito si no planeas ni trabajas para ello”.
Grant Cardone.